En mi cabeza podía retumbar como decía en voz alta “estoy embarazada” . Cada noche tras noche parecían ser el mismo sueño. Gritar a los mil mares que estaba embaraza, mientras toda la gente se acercaba a susurrar y a empezar a circular chismes sobre mí.
Suspiré al no volver a caer en esa pesadilla tan despreciable. Tragué saliva mientras mi mente vagaba por tratar de responder preguntas, evadiendo el tema “delicado”.
-¿Neily? –dudó que fuera yo con todo el alboroto que hubo al no responder yo primero-.
-Si –respondí insegura. Más que nada intentaba parecer lo más normal, pero no podía evitar dejar que mi voz temblara.
-¿Cómo has estado? –consiguió que el hablar con él me fuera mucho más sencillo de lo previsto, pero ni eso me hacía a olvidar a su hermano.
-Bien –respondí a secas. Mi cuerpo ahora comenzaba a sentir desesperación. Supuse que eso fue lo que irritó a Lydia justo cuando la punta de mi zapato resonaba con fuerza.
No pensé que aquello se convirtiere en una charla cortante a un silencio incomodo. No tenía la mente bastante desprendida como para hacer preguntas. Estaba totalmente seca.
-Mi má me ha dicho que hablaste –comentó en un momento de despejar el silencio, algo que, por lo cual ahora me sentía mucho más nerviosa. ¿Qué respondería a eso?
-Oh..no- es nada- de veras –fingí estar tranquila. Pero había salido mucho peor de lo esperado. Intenté pensar de una manera urgente algo que me excusara de aquello, ya que sabía que Tom respondería…
-Mientes –declaró algo exaltado- ¿Que no me tienes la suficiente confianza para contármelo?
-No –dije honestamente-.
-¿Hablas en serio? –Soltó una carcajada- al final de cuentas sabes que lo sabré ¿verdad?
Me quede muda. No supe que decirle, ya que estaba en lo cierto. Una parte de mí deseaba contárselo a alguien y que por fin mi conciencia me dejara tranquila, pero de alguna forma –sin saber exactamente muy bien los motivos- todos se enterarían y provocarían problemas tanto como en mi familia, amigos como en los medios de comunicación. Todo se saldría de control.
-Es solo que –me callé al estar a punto de hablar. Necesitaba decir algo – no puedo Tom, sabes que no puedo confiar en ti a causa de tu …
Ni siquiera pude pronunciar su nombre. Tantas veces lo nombré en mi mente, que me causaba algo extraño no nombrarlo con mis labios. Aun así sentí como mi estomago se revolvía lentamente y mi corazón latía abatido.
-¿Bill? –insinuó fingiendo estar inseguro, aunque sabía perfectamente que se trataba de su único hermano gemelo.
-Así es –me sentí débil. Fue como si hubiera perdido una batalla. Como si hubiese dado el último respiró- todo se lo dices.
-Ya te lo dije –se excusó en forma divertida- él puede casi leer mi mente sin que yo se lo diga –hizo una breve pausa y continuó- hay algunas veces, raras veces, en que podemos guardarnos cosas, pero no es culpa mía si se llegara a enterar de un secreto.
-No lo sé Tom –intenté decidirme ante aquello. Contárselo sería jugar arriesgado y podría acabarse el mundo para mí.
-¿Es algo acerca de ti con Bill no es así? –intentó adivinar.
-¿Me estás leyendo la mente a mi también? –bromeé soltando una carcajada.
-Si te preocupa que Bill se entere –dijo con una voz casi parecido a un sabio que lo sabe todo- supuse que el tema hablaría de él.
Me arrepentí de todo acerca de esta conversación. Ahora más que nada deseaba haberme callado, haber mentido aunque sea haciendo el intento. Estaba muerta.
-Estoy embarazada –solté un grito horrorizado-.
Hubo un gran silencio. No supe si lo que me estaba matando por dentro en ese momento era habérselo gritado o que Tom no respondiera nada.
Definitivamente el que Tom no dijera nada en ese momento.
-Vamos di algo por favor –dije chillante en suplica. De haber estado cercas de él hubiera suplicado de rodillas.
Sin saber cómo, automáticamente mi dedo índice se estaba quedando sin uña. Nunca pensé que rápidamente descendiera el coraje hacia Tom. No hubo respuesta alguna y me estaba matando poco a poco. Durante ese silencio no pude evitar hacerme la pregunta de si Bill sabría que estoy embarazada o que sucedería en caso de que lo supiesen todos.
-¿Tom? –hubiese deseado ser yo la que preguntara eso, aunque lamentablemente nunca se me ocurrió. Sabía a penas duras que alguien había hablado cercas de Tom- ¿Qué haces? –volvió a preguntar aquella voz.
Escuchar esas palabras retumbo sobre mi cabeza como un eco interminable. Era la voz de la que alguna vez me dejó quebrada y conquistada. Que controlaba mi corazón de una forma brusca y tranquila a la vez; y de la que alguna vez yo estuve enamorada de esa voz.
Pero algo tan inquietante como mis pensamientos profundos me llamó más la atención. Estaba atrapada. ¿Bill ahora sabría la verdad? ¿Qué le respondería Tom?
-Bill –se sorprendió Tom. Su voz ni siquiera me dio una pizca de cómo se encontraban ambos en sus rostros. Al estar segura de que aquel fuera Bill, mi corazón no paró de latir con fuerza y casi sentí que podían escucharlo a través del teléfono. Incluso traté de tapar un poco el celular para que no pudieran escuchar que estoy ahí, aunque me sentía como una tonta.
-¿A dónde has ido? –preguntó Tom fingiendo interés, aunque en su voz lo notaba algo preocupado. Imaginé que deseaba cambiar el tema.
-Fui de compras con Aliz –pude escuchar a Bill con mucho esfuerzo. Parecía estar retirado y se me dificultaba escucharlo- prometiste que volverías y nunca lo hiciste.
-Estaba con una chica –se excuso despreocupado- nada fuera de lo normal.
-Sabes que tenemos que hablar aunque…. –esa pausa tan brusca me hizo sentir mucho más asustada que nunca. No paraba de temblar y deseaba con todas mis fuerzas que terminara la conversación- ¿Qué es lo que haces? –preguntó Bill quien sonaba sorprendido.
Alejé de mí el celular y pensé en colgar. Eso me salvaría de muchas cosas. Pero así como deseaba que terminara todo aquello, también deseaba volver a escuchar y saber cómo terminaban las cosas.
“Cuelgo o no cuelgo, cuelgo o no cuelgo” –pensé cerrando los ojos e intentando pensar más rápido. Opté por seguir escuchando.
-Nada –mintió nervioso. Aquello me provocó un malestar en el estomago-.
-Sabes que habló Neily –comentó Bill quien ahora podía escuchar su voz a la perfección- me lo dijo mi madre- hizo una breve pausa y luego continuo -¿Para qué crees que haya hablado? –aquello sonaba como si fuese un dialogo donde dos personabas trataban de actuar, aunque internamente sabíamos que en realidad solo fingían. Parecía ser la misma situación.
Esto de la telepatía entre hermano ya no me estaba gustando. Incluso me sentía como una niña pequeña escuchando la conversación de mis padres detrás de la puerta hablando sobre cuál sería mi castigo. Era aterrador.
-No tengo idea –admitió fingiendo no estar interesado- ¿Por qué no lo llamas y averiguas que es lo que sucede?
Eso fue suficiente, lo suficiente para colgar y aplastar mi celular en cuanto lo apagara, para que no volviera a llamar y no supiera nada de mí. Era mi única opción aunque sonaba un poco absurdo.
De pronto, ya no eran mi dedo índice la que podría quedarse sin uña, parecían estar en juego los demás dedos.
-Ni hablar –respondió él exaltado ante la propuesta de su hermano- mejor dejemos las cosas así, ella se encuentra mucho mejor en los Ángeles y yo estoy mejor que nunca- la palabra “mejor que nunca” había sido un golpe bajo justo en la parte en mi abdomen y lo suficiente para preguntarme ¿Qué habían hecho Aliz y Bill?
-Eres pésimo mintiéndome a mí –dijo Tom soltando una carcajada, lo cual solo logró confundirme-.
-Lo mismo digo queridito hermano –sonó también divertido- y sé que hay alguien al lado de la línea –el silencio nos invadió un poco pero aun así imaginaba que ya se sabía toda la verdad. Nos habían atrapado tanto como a Tom como a mí- la pregunta será –continuó Bill casi susurrándole a su hermano -¿Quién es?
Me quede sin aliento y una vez más casi sentí venir un desmayo. Ni siquiera podía pronunciar ni una sola palabra. Mi garganta se encontraba cerrada y me pareció tan extraño haber vivido una experiencia como esa. Admito que las extrañaba –experiencias como esas- vivirlas donde no hay límites y la vida continúa siendo pesada aunque lamentablemente esos días, para mí, habían llegado a su fin.
Sabias que??? (*2) CAPITULO NUNCA ANTES VISTO
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Bueno me gustaría poder redactar como hubiera sido el final de la historia
que apareció en mi cabeza desde un principio. Y antes de que puedan
preguntarse ...
1 comentarios:
:O
dios mio voy a morir de los nervios esta muy bueno me quede O.O cuando aparecio bill continuala
por favorrrr
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